Internet ofrece un espacio de libertad anónimo a aquellos que están estigmatizados socialmente, en el que compartir experiencias e intereses comunes. Así se constituyen en Internet comunidades virtuales sobre intereses comunes, a través de redes sociales, foros y blogs, que se caracterizan por la libertad de expresión y una gran voluntad por interaccionar, es decir, por participar y formar parte de alguna forma de esa comunidad, leyendo, comentando, etc.
En estas comunidades virtuales no solo se transmite información, sino que además se producen o suelen producirse fuertes vínculos afectivos, lo que hace que estas comunidades se caractericen por ser potentes refuerzos de conductas marginales o potencialmente peligrosas.